Los parches invisibles anti-imperfecciones son un tratamiento localizado en formato transparente que actúa directamente sobre granitos y brotes activos. Su barrera protectora aísla la piel de la suciedad, bacterias y contaminación, acelerando el proceso de recuperación y evitando que la imperfección se agrave. Gracias a su textura ultradelgada e invisible, pueden usarse tanto de día como de noche sin ser perceptibles.
¿Cómo funcionan?
Su fórmula combina Niacinamida y Ácido Salicílico, dos activos reconocidos por su eficacia en pieles grasas o con tendencia al acné. La Niacinamida mejora la textura y uniformidad de la piel, mientras que el Ácido Salicílico, al ser liposoluble, penetra en los poros para limpiarlos y desobstruirlos, ayudando a reducir imperfecciones y prevenir marcas post-acné.